Sofía...

Después de dejar Tesalónica, otra vez tren hasta Sofía. Esta vez uno de la antigua unión soviética, muy cómodo la verdad, al ser de noche, volvimos a coger vagón cama, pero con bastante diferencia con el tren que habíamos traído hasta aquí.
Fue coger la cama y dormir, bueno dormir hasta la frontera, donde a las 4.00 de la mañana me levantaron para pedirme el pasaporte. Primero la frontera griega, pasa un tipo gritando por el pasillo del tren ¡¡pasaportes!! Pues preparo los nuestros, y a eso de los 5 minutos, dos militares griegos, un policia y un interprete. Resulta que una semana antes se había fugado un ruso de una cárcel de aquí, como por el centro de grecia, había pedido ir al servicio, le quitaron las esposas y se cargó a dos policias sin pestañear. Pues le piden el pasaporte al de la cabina de al lado de la mía, y adivina de dónde era, pues si de la madre Rusia. Le suelta el policia, tu eres Ruso?, eres de la mafia?, te gusta matar policias?, yo a escasos dos metros no pude aguantarme la risa. El ruso que no se enteraba de nada, pues le retuvieron el pasaporte y tal, a mi llegaron, vieron pasaportes españoles, y nada, pueden seguir durmiendo me soltó...
A la hora o así, llegamos a la frontera búlgara, otra vez la misma historia, joder, se han propuesto que yo no pegue ojo. Venga otra vez la tonteria esta de enseñar el papelito... pues no, esta vez estabamos saliendo de europa. A las 5 de la mañana, sobao perdio, me pide un policia con un inglés muy muy pesimo, el pasaporte, Spanish? yes. Face control. Toma linternazo que me metió en to los ojos. Y después me quedo esperando el pasaporte y se lo pasa al de atrás que lo mete en un montón que llevaba, pfffrr que mal royo, en una frontera con europa sin los pasaportes... Pues pasó como una hora en la que el tren se movió incluso y en la que yo estuve literalmente "acojonao". Hasta que le pregunté al revisor cuando me devolvían el pasaporte, ten minutes, pues nada, a esperar. A los diez minutos más o menos, la verdad que se aproximó, nos los devolvieron.

Después dormí lo que pude hasta Sofía, y ya llegando nos encontramos con ese manto blanco tan desconocido para mi... la nieve. Estaba todo nevado y seguía nevando. Era como el que ve por primera vez el mar, yo había ido a la nieve, pero nunca había visto nevar. Nos bajamos del tren y si, un frío del carajo (-3 a -5) pero llevable.

Sofía la verdad que inesperada, no es nada de lo que me imaginaba y no me imaginaba nada de lo que era. Lo primero nos advierten que los búlgaros son peligrosos y desagradables, falso, a mi me ayudaron incluso sin pedirlo. Nadie sabe inglés, falso, yo no se búlgaro y me apañé, y puedo prometer que no hablé en griego! Pues Sofía es una ciudad muy pequeña (sobre todo viniendo de Atenas), se puede recorrer andando facilmente, aunque hace frío, la verdad que se puede llevar, y si lo digo yo que no lo soporto nada, para los de Moscú debe ser el caribe. Los precios bajos, en comparación con Europa, he sentido lo que es ser rico, lo que pueden sentir la gente con poder adquisitivo de verdad, lo que sientes mis compañeros con destinos más conflictivos y que salen beneficiados en el tema económico... Armando tiene que estar viviendo como un auténtico zar.

Algunas fotos tomadas en Sofía.

Cambio de guardia al más puro estilo soviético.

Carne de cordero con queso de buey.
Sí, no me puedo resistir a la comida, y además la búlgara no defrauda.

Cordero con salsa de piñones y no se que más.
Otro plato buenísimo, más bueno que el anterior aún.

También hay que decir que la comida que te puedes comprar en la calle es también digna de mención, que si empanadas de queso, roscas de pan, pan... No puedes ir a Sofía y no comer de todo eso, casi más recomendable que ir a un restaurante. Todo lo que probé en la calle me encantó. Y ya se sabe, el frío es menos frío recién comio.

Este es el río que rodea casi toda Sofía,
muy bonito y nevado.

Esto es una estatua a la orilla del río, no se que simboliza,
pero son dos tipos caminando.

Esta estatua está en el centro de Sofía, tampoco se lo que simboliza,
supongo que es Sofía, lleva una corona de laurel y un gavilán, paloma o similar.

Si no lo entendí mal, esto es la tumba del soldado desconocido.

Y esto es la Catedral, en una plaza bastante grande y con bastante frío.

Dos Almeriense pasando frío rodeados de nieve en Sofía.

Pues ya no me queda más que enseñar de Sofía, porque no es plan de sacar fotos de las mil tiendas a las que entramos. Hay más cosas, pero en dos días no da tiempo a más...

Después de todo el viaje...

Primera estación... Tesalonica

Ya tenía ganas de hacer algún viaje internacional, de esos que te ponen un sellito en el pasaporte! Pues decidimos ir a Sofía, capital de Bulgaria. ¿Por qué? ¿Y por qué no?

Nos pillamos tren, trenes, mucho tren. Salimos de Atenas desde la estacion de Larisa aquí en Atenas, la estación bastante penosa. Una sola sala de espera que estaba copada de japos durmiendo! Que curiosos que son, será que están acostumbrados a los espacios reducidos pero no tenían ningún problema en dormir ahí todos metidos, en su sitio es si, sin molestar al de al lado ni nada. Pero bueno, hubo que esperar poco para coger el tren y había muchisima ilusión antes de empezar el viaje. La cosa empieza bien, sacamos billete de ida y vuelta a Tesalonika, como ibamos de noche, vagón con cama! Y empezamos bien. Las camas de arriba del todo, y a Rocío que le daban miedo las alturas!! Pues bueno, este viaje bastante bien, también tengo que decir, que los trenes, como las carreteras pierden mucho contra los españoles. El ruido y el traquetreo no paró en todo el trayecto, bueno eso y los ronquidos de la tipa de abajo! que decía que había cogido un vagón sólo para mujeres y cuando yo me subí decía que me estaba equivocando y que me tenía que ir! No me lo podía creer, cállese señora, que no está usted en edad de estos sulfuros.

Pues llegamos a Salonika y claro, había que verla. La ciudad es muy bonita, pequeña (si la comparamos con Atenas), y abierta al mar. Tampoco es que tenga demasiadas cosas que ver, la ciudad sufrió un incendio en el que se quemó una gran parte, ya que no tenían departamento de bomberos por aquellos entonces (hace mucho de esto). Lo que si que tiene son iglesias, es increible la cantidad de ellas que tienen, que si Agios Dimitrios, que si Agios Antonios, en fin muchos Agios.
Esta es la iglesia redonda de Tesaslonika, en principio iba a ser una casa que el emperador Teodosio le iba a regalar a su hija, pero nunca llegó a terminarse, llegaron los Turcos y la convirtieron en mezquita, por eso el alminar, y cuando volvieron a conquistar la ciudad, volvió a ser iglesia, ahora mismo está en reconstrucción...
Lo que no se puede dejar de visitar al menos en mi opinión es la torre blanca. Una torre de vigilancia que ha tenido varias misiones a lo largo de la historia que está pegada al mar y domina toda la ciudad que quedaba dentro de las antiguas murallas hasta el castillo.

Cuando los turcos dominaron la ciudad la convirtieron en juzgados, cárceles y centros de castigo. Además obligaron a los jóvenes católicos y ortodoxos voluntarios a buscar a todos los católicos para "convencerlos" para que se convirtieran al islam. Una vez que no quedaban más decidieron que ya no les eran necesarios y para dar ejemplo los mataron y dejaron colgados en la torre para que su sangre pintara la fachada. Por ello se llamó la torre de sangre durante mucho tiempo y cuando echaron a los turcos de aquí, la pintaron de blanco inmaculado para borrar ese recuerdo.
Después a lo largo de la historia ha servido de escondite y refugio, se camufló durante la Segunda Guerra Mundial para que no la destruyesen... en fin, que es una torre con historia.
No hay que olvidarse que es la tierra de Alejandro el grande, Alejando Magno, hijo de Filipo de Macedonia, cuya tumba (la de Filipo) está en Érgina, a unos kilómetros de Tesalónika y que en otra visita habrá que ir a ver.

Pues la ciudad es muy acogedora, a pesar de estar el día jodido y lloviznarnos durante todo el día. Después de dar una vuelta y comer en una taverna muy chula, a eso de media tarde la llovizna se convirtió en lluvia y no nos quedó otra que irnos a la estación de tren, que huele a plan Marshal desde lejos, una estación altísima sin calefacción y casi sin nada, con unos baños MUY asquerosos y que no recomiendo a nadie. Comer en la cafetería, que eso si que está bien, y como no, jugar al tavli hasta jartarnos. Pa eso de media noche otra vez al tren, esta vez destino: Sofía.

Meteora

¿Qué hacer? ¿Dónde ir? ¿Es sólo la acrópolis y las islas?

Pues no, hay un lugar llamado meteora, como por el centro de Grecia, donde decidimos irnos, y sin pensar ni un poco, alquilar coche y a buscarse la vida toca, lonely planet en mano y a la carretera!


Está como a 4.5 horas más o menos de Atenas, y para llegar pasamos paisajes de todos tipos y colores, primero pegado al mar, después terreno árido, después verde que te quiero verde... En fin, que Grecia es muy grande diversa y bonita, sobre todo bonita. Mucho más que Atenas, que ojo que no digo que no me guste, sólo que hay más cosas que merecen ser vistas, muchos pueblos costeros, muchos puertecitos pesqueros con los barcos más tradicionales y con los artes más antiguos y manuales, que no todo es industrial.



Pues llegamos a Kalambaka, gran consejo el de David (espero que esté bien en Delhi, se merece lo mejor), buscamos el Karma, aunque no lo encontramos, supongo que será un pub de temporada y nosotros fuimos el día de Navidad... Pero bueno, un pueblecito muy bonito, de montaña, acogedor, con gente típica y las típicas viejecitas del xronia que xronia (que por cierto significa "años y años" y se escribe "χρονια και χρονια" y es la pregunta más hecha por los españolitos, si es que somos todos iguales), con paisajes bonitos y nieve! Yo que soy de Almería donde vamos a ver la nieve, me pareció un lujo. Pues el sitio es indescriptible, lo había visto en fotos y postales, pero nada que ver con lo que se siente estando allí.







Lo principal son los monasterios, pero yo no podría dejar de lado los paisajes, el entorno, impresionante. Una visita obligada para todo el que pase por Grecia y le gusten estas cosas claro. Que si sólo te gustan las playas no te pases por allí!
Mañana pondré las fotos que hoy me las he dejado en mi casa y ahora estoy en la oficina. Como se enteren los del chichi...
Nota para megafrikies: ¿A ver quién sabe en cual rodó James Bond?

Mis primeras...

Éstas han sido mis primeras navidades fuera de casa, y claro, con los días de vacaciones que tenemos los becarios, no nos podemos permitir irnos cuando queramos. Que es un año y ocho días no son nada. Pues todo pintaba fatal, que pasaría la peor navidad de mi vida, a 4000 kilómetros de mi familia, mi madre, padre, hermano, novia... Pues no, mi novia me hizo el mejor de los regalos... ¡ELLA! ¡Se vino para Atenas y se pasó toda la navidad conmigo! Eso si, la familia es la familia y siempre se echa de menos, la nochebuena sobre todo, fue lo peor.

Pues las navidades en general no han estado nada mal, he estado con mi novia, he ido a varios sitios, visto muchas cosas, y hecho otras tantas, alguna de ellas por segunda vez, y la verdad es que no es lo mismo hacer las cosas solo, que acompañado, hasta el aire huele diferente.


Pues la verdad es que hemos aprovechado mucho el tiempo, nos hemos reconciliado, que ya era necesario, nos hemos querido, hemos estado mucho tiempo juntos y hemos vivido muchas cosas juntos que de verdad que se echaba de menos y ahora hace que ya no sepa igual las cosas que pueda hacer. Una noche de marcha, un paseo, una comida, un desayuno, una partida de tavli, nada es lo mismo.

Ahora estoy sólo otra vez, aquí a 4000 km. y echo de menos todo.